Verano turbulento
5 de junio de 2003
El empresario textil, Hans Rudolf Wöhrl, originario de Nuremberg, causó una gran sorpresa en el mundo de la aeronáutica al comprar la aerolínea Deutsche BA (DBA) - subsidiaria de la British Airways - por el precio simbólico de 1 Euro. El piloto apasionado Hans Rudolf Wöhrl es hijo del fundador de la casa de modas "Wöhrl", que cuenta con 39 sucursales en toda Alemania y factura unos 350 millones de euros al año. Wöhrl asumió el negocio del padre, pero nunca descuidó su pasatiempo favorito: la navegación aérea. Durante los años 70 estableció un puente aéreo entre Nuremberg y París. De aquel servicio aéreo, llamado NFD, surgió la actual compañía Eurowings, cuyos aviones pilotaba ocasionalmente el propio Hans Rudolf Wöhrl hasta hace unos meses.
En un año crecer un 20 por ciento
Wöhrl parece ser un hombre de "armas tomar" y piensa, a partir del 1 de julio - fecha oficial del traspaso - dirigir él mismo los negocios de la segunda línea aérea más grande de Alemania. En el lapso de un año espera incrementar la productividad en un 20% y las ganancias en un 10%. Además se prevé incluir las metrópolis europeas en el plan de vuelos de DBA.
Buenas condiciones para Wöhrl
Mientras que los 800 empleados de DBA tienen la suerte de haber conservado su puesto de trabajo, los pasajeros terminarán añorando épocas pasadas. Wöhrl ya declaró que su meta no es llegar a ser la aerolínea más barata, sino ofrecer la mejor relación entre servicio y precio. Con esta nueva máxima de trabajo Wöhrl obtuvo la adjudicación de la aerolínea con sede en Munich y le ganó a cinco candidatos más.
Pero además de buenas intenciones, Hans Rudolf Wöhrl y su familia tienen un muy buen nombre en Baviera. Su esposa, Dagmar Wöhrl – miembro de la directiva de la Unión Cristianosocial (CSU) y diputada – sirve de nexo directo con el gobierno bávaro, y el Ministro del interior bávaro, Günther Beckstein (CSU), es considerado su amigo. Según expertos y amigos las condiciones son favorables para Wöhrl: es un apasionado de la aeronáutica, un exitoso hombre de negocios y tiene excelentes contactos con el gobierno bávaro.
El cliente prefiere lo barato
Pero aunque Wörhl haya negociado muy bien, obteniendo subsidios millonarios durante un tiempo limitado, no podrá hacer magia y llenar de un día para el otro los aviones medio vacíos de la Deutsche BA. Menos aún considerando que en épocas de crisis lo que cuenta es el precio y no tanto el servicio. Ese es precisamente el secreto del éxito de la aerolínea irlandesa Ryanair que, a diferencia de la tendencia general en el ramo, hizo excelentes negocios en el ejercicio 2002/2003: sus ganancias se incrementaron en un 59% a 239,4 millones de euros y las facturaciones un 35%, llegando a 843 millones de euros. Sin embargo advierte sobre un probable descenso de un 10% en la facturación durante este año, debido a la fuerza del euro frente al dólar y a la libra esterlina. No hay que olvidar que aproximadamente la mitad de los pasajes de Ryanair se venden en libras. Por otra parte, la compañía también se beneficia de la debilidad del dólar frente al euro, ya que los precios de combustible se pagan en dólares.
Ryanair ataca a Lufthansa
La compañía irlandesa prevé nuevas rebajas de precios para este año y aspira aumentar así el número anual de pasajeros de 8 millones a 24 millones. De este modo Ryanair pasaría a ocupar el puesto de Air France, la tercera línea áerea en el mercado europeo. Para los meses de junio, julio y agosto se anuncia la venta de un millón de pasajes de ida, por valor de entre 28 y 42 euros.
El jefe irlandés, Michael O’Leary, calcula que dentro de tres años su aerolínea transportará a más de 30 millones de pasajeros y será entonces la compañía aérea más grande de Europa, desplazando incluso a Lufthansa y a British Airways.