¿Una retirada vergonzosa para Leipzig?

En el mes de abril el júbilo fue ilimitado. Leipzig, una de las ciudades más importantes del oeste alemán, logró imponerse frente a Hamburgo y otras metrópolis rivales, en la contienda por la sede de los Juegos Olímpicos de 2012. Ahora, pocos meses después, lo que parecía un sueño se ha convertido en una pesadilla.

Tres directores de alto rango del comité organizador local han tenido que dimitir por escándalos de corrupción, uno de ellos es acusado incluso de haber colaborado con la temida Stasi, el órgano de control de seguridad interna de la extinta República Democrática Alemana (RDA). Los más pesimistas no excluyen incluso que Leipzig retire su candidatura a las Olimpiadas de 2012 - lo que sería el desenlace trágico de un sueño olímpico.

Carrusel de dimisiones

Hace tres semanas el comité que se encarga de la candidatura de Leipzig a ciudad olímpica, presentó su emblema que simboliza una llama en asociación al Fuego Olímpico. Sin embargo este fuego no parece calentar sino todo lo contrario: Apenas presentado el emblema, la llama parece apagarse ante violentas tempestades de tipo personal. El problema se centra por lo visto en la nominación errónea de los representantes del comité, que están involucrados en cobros de comisiones ilícitas.

Hasta hace unos días el debate en el seno del comité era calificado de molesto, pero un problema interno al fin. Hasta que dimitió el responsable de la candidatura en el ayuntamiento de la ciudad, Burkard Jung. Jung la mano derecha del Alcalde de Leipzig, Wolfgang Tiefensee, dejó el cargo por un supuesto cobro de comisiones ilícitas relacionadas con la organización. Este último episodio de un auténtico carrusel de dimisiones y ceses por escándalos diversos, podría hacer extinguirse definitivamente la débil llama olímpica.

El Comité Olímpico Internacional (COI) parece ignorar, hasta ahora, los debates en el seno del equipo organizador de Leipzig. Mas si la tempestad arrecia, y sobre todo, si continúan las acusaciones de manipulación de finanzas, es de esperarse que el COI reaccione tajantemente, pues aún está fresca la memoria del escándalo de corrupción en el que quedó sumido en los Juegos Olímpicos de Salt Lake City.

Una semana y el tiempo corre

En Alemania ha surgido el interrogante de si no sería mejor poner un pronto fin a tan triste espectáculo y retirar definitivamente la candidatura de Leipzig, acabando así con la pequeña esperanza de que Leipzig pudiera convertirse en sede Olímpica. Como sea, el gran entusiasmo que despertó en el público alemán la aplicación de Leipzig se ha visto empañado por la ola de escándalos. El lema de candidatura de Leipzig "Participar lo es todo" incluso parece una mala broma.

Por el otro lado poner fin así al resplandor Olímpico de Leipzig tendría consecuencias vergonzosas. No sólo el deporte alemán resultaría perjudicado. Esta decisión pondría en duda la credibilidad de Alemania en general. También el ámbito político y económico podrían verse perjudicados.

El alcalde de Leipzig, Wolfgang Tiefensee, cuenta con sólo una semana para ordenar sus filas. Si durante la próxima sesión del Consejo de Supervisión del Comité Olímpico no logra presentase como una sede capaz de cumplir con la tareas encomendadas por el COI, las ambiciones olímpicas de Leipzig podrían verse definitivamente truncadas.