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Un drama lleno de misterios

Gabriel González31 de julio de 2003

Círculos diplomáticos de Berlín confirmaron que los secuestradores de los turistas en el Sahara están en contacto con autoridades de Mali. Fuentes en ese país reportan que un video muestra que los rehenes aún viven.

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Uno de los grupos secuestrados en Argelia.Imagen: AP

El caso de los turistas europeos secuestrados desde fines de febrero en Argelia y ahora en Mali se está convirtiendo en una carrera contra el tiempo. La odisea involuntaria de los diez alemanes, cuatro suizos y un holandés en el desierto del Sahara es cada vez más misteriosa.

Fuentes diplomáticas en Berlín confirmaron que los secuestradores establecieron contacto con notables en la ciudad de Kidal, en el noreste de Mali. Según fuentes no oficiales en Mali, los secuestradores enviaron un vídeo al presidente del país para demostrar que los europeos aún viven. En el mensaje no se habla de la mujer alemana que falleció en el camino a consecuencia de una insolación.

Temores por el clima

La noticia sobre la primera víctima del secuestro en Argelia fue un golpe duro para los familiares alemanes. La muerte de una madre de dos hijos que no aguantó las condiciones climáticas en el desierto hacen temer lo peor para el resto de los 14 secuestrados. ¿Cuánto tiempo más aguantarán los secuestrados las fatigas?

Las condiciones de vida en esa zona son muy duras, ya que a las altas temperaturas de esta época, de hasta 48 grados a la sombra, se une la necesidad de disponer de agua en grandes cantidades. En su mensaje, los secuestradores admiten que les está costando cada vez más alimentar al los rehenes, indicó uno de los notables en Kidal.

Argelia ya no quiere saber más

Con el traspaso de la frontera hacia Malí, las autoridades argelinas parecen estar muy satisfechas de haberse librado del peso de este asunto. El diario argelino El Watan reportó que el Gobierno en Argel ya no se siente involucrado en el drama de los rehenes. Para ellos, el destino de los europeos está ahora en manos de Malí. Partiendo de la veracidad de esa información, sería una postura demasiado cómoda, ya que los secuestradores son obviamente argelinos, supuestamente miembros de la banda terrorista Grupo Salafista para la Predicación y el Combate (GSPC).

El Gobierno alemán sigue manteniendo un estricto bloqueo informativo sobre el secuestro. Los familiares de los secuestrados afirman que se encuentran en estrecho contacto con el ministerio de Asuntos Exteriores, pero que la información otorgada sigue siendo escasa.

Comparaciones con Jolo

En la prensa alemana frecuentemente se compara este caso con el del secuestro de turistas, en mayo del 2000, en la isla filipina de Jolo. Las diferencias son obvias. En Jolo, los secuestradores dieron diariamente entrevistas y permitieron también entrevistar a los rehenes. Fue todo un espectáculo mediático.

Con la llegada a Malí aumentaron las esperanzas de una liberación de los rehenes en breve. Sin el ejército argelino pisándoles los talones, la falta de atención mediática, y unos rehenes al borde del colapso los secuestradores deberían tener interés en acabar esto cuanto antes. Ojalá sin arriesgar la vida de los rehenes.