Turquía rechaza tropas de EE.UU.
2 de marzo de 2003
Según el primer ministro turco, Abdulá Gul, el rechazo al despliegue que anula una aprobación previa, no exime a Irak de cumplir con las Naciones Unidas (ONU). Gul advirtió al régimen de Bagdad, que no intente sacar provecho del rechazo del parlamento turco: si las autoridades iraquíes "tratan de abusar de la decisión del Parlamento retrasando la puesta en marcha de las resoluciones de la ONU, harán la paz más difícil".
La moción rechazada hubiera autorizado la entrada de 62.000 soldados estadounidenses en Turquía para una posible ofensiva en el norte de Irak.
Consternación en Washington
Según los expertos, la negativa supone un grave revés para los planes militares estadounidenses en caso de guerra en Irak, y causó gran consternación en Washington. Los EE.UU. habían pactado compensaciones económicas a cambio del apoyo logístico a los EE.UU..
La decisión tomó por sorpresa a Washingotn, que ya había preparado una declaración en previsión del resultado favorable de la votación. "Nos congratulamos por la decisión del parlamento turco de permitir el acceso a Turquía de las fuerzas estadounidense para posibles acciones militares contra Irak", decía la nota.
Ahora Washington busca una aclaración a la posición turca. "Estamos buscando una aclaración y esperamos ver cuál será la decisión del parlamento turco", dijo, Tara Riegler, del Departamento de Estado. El portavoz de la Embajada de Estados Unidos en Ankara, Joseph Pennington, afirmó que EE.UU.
¿Nuevo debate?
Según Abdulá Gul, "las relaciones turco estadounidenses son relaciones estratégicas. No dependen de una simple moción. Por supuesto que continuarán", por lo cual la votación no amenazaría las relaciones bilaterales.
El Gobierno turco podría volver a someter la moción al Parlamento a partir de la próxima semana. El líder del partido en el poder en Turquía, Recep Tayyip Erdogan, explicó que aún no se ha tomado ninguna decisión, ya uqe "no se trata de una decisión que podamos tomar a la ligera".
Según los últimos recuentos, los soldados estadounidenses desplegados en la región del golfo Pérsico en previsión de una guerra ascienden a 225.000, 111.000 de los cuales se encuentran en Kuwait.