Tomates rellenos con suflé de queso

(4 porciones)

 

Tomates rellenos:

4 tomates medianos
2 cdas mantequilla
2 huevos
100 g queso fuerte 
2 cdas de harina
100g queso fuerte rallado 
100 ml de leche fría
Nuez moscada
Sal y pimienta

 

• Precalentar el horno a 190°C.
• Cortar un centímetro de la parte superior de los tomates y vaciarlos con una cuchara. Reservar las tapas y el interior de los tomates.
• Sazonar el interior de los tomates con sal y pimienta.
• Preparar una salsa bechamel; para ello, calentar en una sartén o cacerola la mantequilla, añadir la harina y remover enérgicamente con una cuchara de palo. Verter poco a poco la leche, revolviendo constantemente para que no se formen grumos. Cocer a fuego lento durante unos dos minutos hasta que vaya cogiendo consistencia, y sazonar con sal, pimienta y nuez moscada. Retirar del fuego y reservar.
• Separar los huevos: reservar las yemas y batir las claras a punto de nieve en un bol sin grasa. 
• Rallar el queso y agregarlo a la bechamel. Mezclar también las yemas de huevo y, por último, incorporar con cuidado las claras de huevo batidas.  
• Repartir el relleno de queso en los tomates. Rallar queso por encima y cerrarlos con su tapa correspondiente. 
• Hornear los tomates en un horno precalentado. Después de 20 minutos, cambiar la temperatura a 210 grados y hornear otros 10 minutos más. Servir caliente con la salsa verde. 

 

 

Salsa verde:

2 manojos de hierbas frescas (perejil, albahaca, menta, etc.)
1-2 dientes de ajo
2 cdas de alcaparras
1 limón 
Aceite de oliva
Pan rallado
Relleno de los tomates
Sal y pimienta

 

• Picar las hojas de las hierbas y pelar el ajo.
• Picar el ajo, las alcaparras y mezclarlos con las hierbas picadas.
• Agregar el aceite de oliva, la ralladura y 2 cucharadas de zumo de limón. Luego se añade un poco del jugo de los tomates del relleno y se sazona con sal y pimienta.
• Triturar en una procesadora. Si queda muy líquida, agregar pan rallado. Sazonar la salsa al gusto.
• Sacar los tomates del horno, servirlos con la salsa de hierbas y un poco de pan crujiente.  

 

¡Buen provecho!