Terroristas en la mira

Los más recientes ataques terroristas registrados en Madrid han vuelto a impulsar el debate sobre las medidas necesarias en Alemania y la Unión Europea para combatir el terrorismo. Miembros de los partidos de oposición alemanes, demandan la creación de una Guardia Nacional, como la que existe en Estados Unidos.

Según un informe del dominical Frankfurter Allgemeine Sonntagszeitung, diputados de la Unión Cristiano Demócrata y de la Unión Social Cristiana presentarán un plan basado en seis puntos para un proyecto de "protección nacional", en la que se trabaje conjuntamente con el ejército. Existe fuerte polémica sobre la creación de este cuerpo, rechazado especialmente por los partidos gobernantes, los socialdemócratas y los verdes ecologistas. Se registra, por otra parte, un acercamiento en cuanto a la demanda de expulsiones expeditas de extranjeros sospechosos de tener vínculos con círculos terroristas.

Terroristas sin perfil

Entre las medidas a imponer a nivel europeo, el ministro del Interior alemán, Otto Schily, aboga por implementar el sistema de rastreo por perfiles, que ha comprobado su eficacia para reconocer, en base a ciertos perfiles, vínculos entre individuos y redes terroristas. La mejor forma para combatir posibles ataques terroristas es que la policía y los servicios secretos puedan reconocer lo antes posible a los grupos terroristas, meta que se logra mediante este sistema, según el ministro alemán.

No todos concuerdan con su opinión. El experto en seguridad del partido Los Verdes, Volker Beck, advierte sobre una confianza desmedida en este sistema. En su opinión las formas modernas del terrorismo, basado en miembros que durante años viven completamente integrados en una sociedad antes de tomar un papel activo, restan eficacia a este método. La nueva generación de terroristas por lo general comete sólo un acto delictivo, el atentado mismo. Se trata de un tipo de terrorista difícil de detectar y controlar, incluso con los medios más modernos de video y telecomunicaciones. Beck aboga por reforzar, modernizar y especializar las labores de los servicios secretos.

Expulsión de extranjeros sospechosos

El fin de semana el ministerio del Interior, Otto Schily, indicó que están dispuestos a expulsar de forma más rápida a extranjeros sospechosos de estar involucrados en círculos terroristas. Si la policía y los servicios secretos tienen conocimiento de que una persona resulta un peligro potencial para el país, debe existir la posibilidad de poder expulsarla inmediatamente. Para aquellos sospechosos que no puedan ser expulsados a sus países de origen por amenaza de persecución, pide incrementar la intensidad de vigilancia, limitar sus derechos de estancia en Alemania e incluso la posibilidad de detenerlos, según una entrevista publicada por el periódico Berliner Zeitung.

Estas declaraciones muestran un claro acercamiento entre las posturas de los socialdemócratas en el Gobierno y la oposición cristianodemócrata. El ministro del Interior del estado de Baviera, el conservador Günther Beckstein, ha aplaudido las palabras de Schily, y pide además limitar la comunicación de los extremistas extranjeros, como por ejemplo, limitar su posibilidad de uso de teléfonos móviles. Observadores independientes se preguntan si la sombra del terrorismo no está llevando a que los estados europeos, entre ellos Alemania, socaven las bases del estado de derecho libre y democrático. Con lo que el terrorismo lograría justamente una de sus metas, acabar con la libertad y democracia en el mundo occidental.