Ejecutivo nigeriano de FIFA denunciado por vender voto es investigado

La Comisión de Delitos Financieros y Económicos de Nigeria (EFCC por sus siglas en inglés) abrió una investigación contra Amos Adamu, el directivo de la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) y de la Confederación de Fútbol Africano (CAF) tras la acusación de que habría transado su voto sobre la decisión para la sede próximos campeonatos mundiales en $800.000.

Según la denuncia hecha por el periódico inglés Sunday Times, Adamu y Reynald Temarii, de Tahití ofrecieron vender sus votos a periodistas de ese medio, quienes se hicieron pasar por representantes de un consorcio estadounidense.

Tras la denuncia, el comité de ética de la FIFA suspendió de manera transitoria a los dos ejecutivos y a otros cuatro funcionarios. El tema cobra especial delicadeza en vista de que todo debe quedar esclarecido antes del próximo 2 de diciembre, cuando se supone que se debe realizar la elección de la sede del Mundial 2018 y 2022.

"Compró su entrada en la FIFA"

Según informó el diario local The Guardian, Femi Babafemi, vocero de la EFCC, manifestó que esa institución decidió investigar el asunto por el daño potencial que representa para la imagen del país.

Explicó que la EFCC hará una investigación internacional antes de determinar si cabe una acusación formal contra Adamu, quien entre otros puestos fue director general de la Comisión Nacional de Deportes de ese país.

Ese mismo medio publicó fuertes declaraciones en contra de Adamu por parte de un reconocido dirigente y promotor deportivo de ese país.

Martin Osaile, quien en la actualidad se desempeña en la Asociación de Deportes para Veteranos, manifestó a ese medio que Adamu, "compró su entrada por la puerta trasera a la FIFA y la CAF, ya he advertido a los nigerianos sobre él, ha controlado un grupo de mafias en nuestros deportes desde 1994".

"Era como un chiste"

El otro directivo de la FIFA señalado en la denuncia, Temarii, representa en esa instancia a la Confederación de Fútbol de Oceanía (OFC, por sus siglas en inglés), la cual a la vez preside.

Temarii habría sido filmado por el equipo periodístico del Sunday Times solicitando 3 millones de dólares neozelandeses (alrededor de $2,3 millones) para establecer una academia deportiva en Auckland, Nueva Zelanda.

Según una nota de la agencia AFP, la OFC en primera instancia ha declinado referirse al tema pues dijo necesitar tiempo para "absorber" la noticia. Para esta organización el golpe ha sido doble pues además de Temarii, otro de los funcionarios suspendidos por la FIFA es Ahongalu Fusimalohi, presidente de la Asociación de Fútbol de Toga, de la misma Confederación.

Temarii, quien alguna vez jugó para el F.C. Nantes del fútbol francés, negó haber cometido cualquier comportamiento impropio, mientras que Fusimaholi manifestó a la emisora local Radio NZ que cuando los periodistas se reunieron con él, haciéndose pasar por cabilderos interesados en comprar su voto, se percató de que todo era falso.

Según dijo, les siguió el juego para descubrir qué querían: "Encontré que era como un chiste, disfruté al mentirles porque ellos también me mentían a mí".

Wynton Rufer, ex delantero de la selección de Nueva Zelanda y elegido como el mejor jugador de Oceanía en el siglo XX calificó todo como "malas noticias para el mundo del fútbol, en diciembre se deben tomar las decisiones sobre los campeonatos mundiales del 2018 y 2022, así que me imagino que en la FIFA deben estar volviéndose locos".

Por otra parte, el presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Jacques Rogge, elogió las medidas tomadas por su colega en la FIFA, Joseph Blatter, ante el escándalo de corrupción.

"Creo que tomó las medidas adecuadas, ya que no sólo está investigando a los dos miembros del comité ejecutivo, sino todo el sistema", dijo a la agencia dpa en Acapulco el máximo responable del olimpismo mundial.

Autor: Vinicio Chacón (AFP / dpa)
Editora: Pablo Kummetz