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¿Propósitos o quimeras de Año Nuevo?

chp1 de enero de 2004

Uno de cada tres alemanes inició este 2004 con una lista de "buenos propósitos". Sólo 18 % de ellos la cumplirán. El síndrome de "renovación" se registra cada fin de año no sólo en Alemania.

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¡Este año lo logro: 89- 66- 89!Imagen: dpa

Con toda seguridad este fenómeno no se limita sólo a Alemania. Levantarse temprano, hacer ejercicio, bajar de peso, dejar de fumar, beber menos, ser puntual, etc. Las listas de buenos propósitos se asemejan sospechosamente en todo el mundo. Pero las buenas intenciones, que a la luz de las velas, los juegos pirotécnicos y el calor del champán o la sidra, parecen viables, se olvidan rápidamente.

Según una encuesta realizada por el instituto demoscópico alemán, Allensabach, 36 por ciento de los alemanes iniciaron el 2003 con una lista de buenos propósitos. El 10 por ciento desistió unos días después de iniciar el año. Un perseverante 74 por ciento se esforzó un mes entero.

Bajar de peso y dejar de fumar

El fin de año es para muchos una noche muy especial, casi mítica. Mientras que los antiguos germanos espantaban con mucho ruido a los malos espíritus y demonios, en la actualidad, los alemanes parecen querer ahuyentar los malos hábitos. Al principio de las listas alemanas se encuentra la reducción de peso, hacer más deporte y dejar de fumar. Los buenos propósitos conllevan por lo general a decisiones emocionales y redituables por los menos para las farmacias, los gimnasios y las oficinas de contacto de parejas. Las farmacias en Alemania registran cada mes de enero un fuerte incremento en la venta de productos dietéticos y sustitutos de nicotina. Para la cadena Weight Watchers enero suele ser el mejor mes del año. Para este enero 2004 esperan un incremento de 50.000 miembros, lo que representaría un 100 por ciento más comparado con diciembre de 2003. Lo mismo acontece en los gimnasios, que registran un crecimiento desproporcionado de nuevos miembros cada mes de enero.

Impulsos ciegos y caros

Otra industria también se beneficia de los propósitos de año nuevo. Los institutos y servicios de encuentro de parejas. No son pocos los alemanes y alemanas que deciden que no quieren pasar solos por la vida. Junto con las jugosas ganancias de enero, se registra también un incremento de ofertas dudosas en muchos sectores. Así por ejemplo, muchos alemanes se percatarán de que impulsados por el impulso momentáneo y ciego de renovación, firmaron un contrato de un año para asistir al gimnasio que no han pisado ni una sola vez en lo que va de los primeros 30 días del año y que seguramente no pisarán en lo que resta de los 335 días. Otros mirarán con horror su cuenta de teléfono de enero del 2004 y se percatarán de lo caro que puede resultar la búsqueda de su "media naranja", pues el servicio de contacto se hacía vía una línea telefónica en la que cada segundo cuesta oro.

Siga intentando

Pero no todos ven brillar las monedas. Así por ejemplo el negocio de la prostitución optaría por saltarse el primer mes del año e iniciarlo en febrero. Según explican las "especialistas del sexo" este es el peor mes del año. Lo que no se debe a un propósito de fidelidad de los hombres, sino a que han invertido casi todo su capital en los regalos de Navidad y los festejos de Año Nuevo.

A pesar de que son muy pocos los que logran cumplir con su lista de propósitos, no hay que perder el ánimo. Según un estudio realizado por los psicólogos canadienses, Janet Polivy y Peter Herman, de la Universidad de Toronto, un buen propósito toma en promedio 10 intentos antes de convertirse en realidad.