1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Presupuestos que preocupan

18 de noviembre de 2002

La coalición de Gobierno alemana acordó medidas para compensar la dramática caída de la recaudación fiscal y la delicada situación presupuestaria. La solución: nuevos impuestos y más deuda pública.

https://p.dw.com/p/2qPw
El Ministro de finanzas alemán Hans Eichel (izq.), considerado responsable de los problemas fiscales, que perjudican al Gobierno de Gerhard Schröder.Imagen: AP

El Gobierno alemán está decidido a enfrentar los miles de millones de euros que faltan en los presupuestos para este y el próximo año. La mala coyuntura internacional y una economía interna que no despega se tradujeron en una recaudación menor de la pensada por un lado, y en mayores gastos sociales por el otro. Para el 2002 faltan 13.500 millones de euros, sumando un endeudamiento adicional total de 34.600 millones de euros hasta finales de año. Se destaca el seguro de paro, que en el 2003 absorberá 14.800 millones de euros, 1.800 más de los inicialmente planeados.

Compensar el desplome de las recaudaciones

Llegó la hora de compensar. Luego de las ampliaciones a la llamada "Ecotasa", el Gobierno conformado por socialdemócratas y verdes también apunta hacia otros sectores. Ahora se decidió introducir una nueva tasa unitaria de 15% para las ganancias resultantes de la venta de acciones, de participaciones en fondos de inversión y de inmuebles, que se realicen del 21 de febrero del 2003 en adelante. El secretario general del Partido Socialdemócrata (SPD), Olaf Scholz, se adelantó a las críticas afirmando que a nivel internacional la tasa alemana sería "inferior a la de muchos países".

Antes del 21 de febrero valdrá un impuesto de 1,5%. De ahí en pos los nuevos tributos podrían suponer una recaudación adicional de 650 millones de euros al año, aunque no antes del 2005. Para el próximo año no se espera un aumento notable de los ingresos por este concepto, mientras que para el 2004 se generará la mitad de la cantidad total prevista.

Los expertos critican

Como reacción a los nuevos impuestos, los expertos temen que para evitar tasas más elevadas aumente la oferta de inmuebles en los próximos meses, con el consiguiente deterioro de los precios de bienes raíces. Asimismo la inversión en bolsa perdería su atractivo. Según los analistas, se trata de una perspectiva poco alentadora cuando al mismo tiempo se recomienda reforzar la previsión privada ante los problemas que sufre el sistema de jubilaciones alemán.

El mundo financiero lamenta este un nuevo viraje de la política fiscal. Los ataques se concentran en el Ministro de finanzas, Hans Eichel, cuyas previsiones cambian cada semana. La oposición lo tilda de mentiroso ("Pinocchio"), lo acusa de "engaño electoral premeditado" o bien hay quien exige someterlo a una investigación parlamentaria. La prensa tampoco ahorra en críticas al ver a Eichel en un "abismo", cuya política fiscal habría "fracasado rotundamente".

Schröder: "ajustes dolorosos"

Por lo pronto el canciller Schröder admite que no espera una mejora del sentimiento público. En consecuencia, también en el 2003 la deuda adicional crecerá más de lo anunciado, 18.900 millones de euros en lugar de 15.500 millones. Así, para el 2003 se espera un déficit del 3,8%, el más alto en los últimos 25 años, y cada vez menos creen que en el 2006 se logre la meta de un presupuesto equilibrado.

A pesar de esta brecha, el Gobierno sostiene que no habría más sorpresas, como el rumor de un aumento del IVA. "Esta discusión carece de base", afirmó rotundo Gerhard Schröder.

Además de la pérdida de recursos, el Gobierno alemán tiene que enfrentar ahora su pérdida de popularidad. En este sentido Schröder admite que "no le sorprende" el descontento popular. La única manera de lograr un cambio sería "trabajando de manera sólida". Un primer ejemplo será exigirle a los ministros y secretarios de Estado que el próximo año renuncien a recibir aumentos de sueldo.