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"No más etapas de sufrimiento para el pueblo cubano"

Mirra Banchón1 de septiembre de 2006

Para presentar un trabajo de años, Amnistía Internacional ha invitado a miembros de un movimiento de disidentes cubanos. DW-WORLD conversó con uno de ellos.

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El movimiento "no depende de la salud del comandante, ni de la biología"Imagen: AP

DW-WORLD: Ustedes son conocidos como promotores del Proyecto Varela, ¿en qué se basaron para desarrollarlo?

Julio Hernández: Es una cláusula muy sencilla, de la Constitución Cubana de 1976, que aún está vigente. Y es el artículo de soberanía, que posibilita a los ciudadanos el solicitar a la Asamblea Popular cambios, si se puede reunir un número de 10.000 firmas. El Proyecto Varela presentó el 10 de mayo de 2002, 11.020 firmas que reclamaban cuatro cosas: derecho a la libre expresión y a la libre asociación; amnistía para todos los presos políticos pacíficos; derecho de los cubanos a formar empresas -no sólo las empresas extranjeras; y una nueva ley electoral.

El gobierno tenía la obligación constitucional de atender y difundir inmediatamente este reclamo en la Asamblea del Poder Popular para discutirlo, aprobarlo o rechazarlo. Pero nunca lo hizo, ni habló de él. Se convocó, según dice el Gobierno cubano, a 9 millones de cubanos que querían hacer "el socialismo irreversible". Si se tiene en cuenta que en la isla de Cuba hay 12 millones de habitantes, si se reunieron 9 millones de cubanos deben haber convocado a las viejitas, a los niños, quizás hasta a los muertos. Sin embargo, a pesar de sus intentos, el artículo 88 en el inciso g que es el capacita el procedimiento de las 10.000 firmas, no lo pudieron cambiar.

El 3 de octubre del 2003 entregamos otras 14.384 firmas… recogidas dentro de Cuba, de ciudadanos con derecho al voto. Ya teníamos más de 25.000 firmas, que estaban reclamando algo a lo que les daba derecho 10.000 firmas. Y sin embargo ha sido desatendido.

DW-WORLD: Ustedes vienen a presentar el programa Todos Cubanos

JH: Aunque el gobierno no haya querido atender los reclamos del Proyecto Varela, el pueblo cubano sigue queriendo cambios, los reclama y desafía al gobierno. El 12 de diciembre de 2003 se convocó a un diálogo nacional a base de un documento, que pretendía reunir los deseos del pueblo cubano y preparar las condiciones para cambiar del totalitarismo hacia la democracia. Estuvimos trabajando dos años completos hasta mayo de este año. De ahí salió el programa Todos Cubanos, de la discusión entre 15.000 cubanos dentro de Cuba como de muchísimos fuera de ella. Tenemos ahora un instrumento para pedir un cambio. Y sólo estamos pidiendo un referendo. Porque es el pueblo el que tiene que aprobar modificar, aumentar o reducir ese programa.

¿El documento se entiende como un programa para la transición?

JH: El documento proclama que el Gobierno se tiene que mover hacia un cambio. Es definitivo que "no hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo resista". Quiere decir que este Gobierno despótico de 47 años en el poder tiene que llegar a su fin y creemos que desde el momento que 25.000 cubanos se decidieron a presentar reclamos al gobierno a pesar de la represión, ya existe la voluntad de cambio en el pueblo. Si no contamos con la voluntad de cambio en el gobierno, habrá situaciones coyunturales… Como las de ahora, en las que "el ciudadano" sea por razones de enfermedad, de muerte, de incapacidad ha delegado sus poderes en cinco personas. Dentro de las cuales podemos identificar distintas maneras de pensar.

Ahí es donde estamos pidiendo solidaridad a la comunidad internacional, aunque no es ésta la que tiene que hacer la transición, sino el pueblo cubano. Pero la comunidad internacional tiene la responsabilidad de tener solidaridad con el pueblo cubano, pues con 25.000 firmas y 15.000 participaciones tiene en sus manos ahora una buena herramienta para decir: "¿por qué no oye usted a sus ciudadanos?"

Kuba - Havanna, Malecon
Un paraíso del que "todo el mundo quiere huir"Imagen: DPA

¿Cómo se explica el componente cristiano del programa?

JH: El Movimiento Cristiano Liberación no es un movimiento religioso, ni responde a ningún sistema religioso. Respondemos a las costumbres, a los valores y los principios del judaísmo cristiano, como civilización occidental. Pertenecemos a un mundo de pensamiento y valores socialcristianos.

¿Con cuántos miembros cuenta el MCL?

Julio Hernández: No somos un partido político para poder contabilizar el número de miembros. Creemos que nuestra idea de pensamiento social cristiano, de un progreso integral del ser humano, de la dignidad humana, la convivencia en paz pertenece no es solamente de los cubanos. En estos momentos no estamos en un momento electoral como para poder decir "vamos a llevar a dos millones de cubanos a las urnas". Eso vendrá en su momento, después.

MCL propone la pluralidad política, pero que se deshaga el Partido Comunista actual…

JH: Nosotros proponemos diversidad dentro de la sociedad, pluralidad, efectivamente. Por eso reconocemos que puede haber un Partido Comunista. Pero la sociedad cubana no puede permitir que sea el Partido Comunista el único que dirija los destinos de Cuba. Ese partido comunista, en el momento en que haya una participación electoral, tiene que serlo en iguales condiciones.

¿Cómo ha sido recibida su propuesta en Europa?

JH: Ha sido recibido con la expectativa grande que produce el caso cubano en estos momentos, por las noticias que se han difundido acerca de la salud del primer mandatario cubano, de las especulaciones que hay con respecto al futuro. Nos ha dado la oportunidad de destacar nuestro trabajo de muchos años, a pesar de la represión. Y de resaltar que éste no depende de la salud del comandante, ni de la biología.

¿Cómo se organizan al interior de la isla, cuáles son los caminos de esta organización?

JH: Los cubanos estamos regados por todo el mundo. Esto ha sido una explosión de un llamado paraíso, que cuando tú pones la Radio Rebelde, la radio cubana o la televisión cubana parece que realmente vives en un paraíso, pero curiosamente todo el mundo quiere huir de ese paraíso. Por lo tanto parece que hay alguna contradicción entre lo que expone el gobierno y lo que es la realidad de la gente, sobre todo los jóvenes que quieren y arriesgan su vida para salir de eso. Pero la participación es una participación muy solidaria en todos los sitios a pesar de la represión, a pesar de las condiciones que en algunas ocasiones que precisamente va en contra de los mejores intereses de las familias dentro de Cuba.

¿Ustedes no incluyen en el movimiento a los conocidos anti castristas de la Florida?

Nosotros incluimos en Todos Cubanos a todos los cubanos, pero aclaramos que somos un movimiento que pretende una solución pacífica para Cuba. Creemos en el derecho de todos los cubanos a participar de la manera que ellos crean más conveniente y más eficaz en cualquier solución para el pueblo cubano. No pretendemos que todos los cubanos piensen como nosotros, pero sí los invitamos a ello, porque creemos que el pueblo cubano no debe tener más etapas de sufrimiento. Y la única forma de evitarlo es que con una reconciliación, a través de una solución pacífica.