Médicos alemanes se rebelan

Las manifestaciones de protesta afectaron a clínicas universitarias en cinco Estados federados con paros de labores en las clínicas de Rostock, Greifswald, Maine, Heidelberg, Friburgo, Ulm, Tubingia, Dusseldorf, Colonia, Múnich y Erlangen. El Sindicato alemán de Médicos exhortó a la organización patronal a realizar negociaciones rápidas para pactar un contrato colectivo de trabajo que contemple el establecimiento de tarifas salariales de acuerdo a las capacidades individuales de unos 70.000 médicos que trabajan en 800 clínicas municipales y regionales.

Los médicos exigen un aumento salarial de un 30% y mejores condiciones y horarios de trabajo. También demandan el pago completo de horas extras así como la eliminación de contratos laborales de tiempo limitado. De no atender sus demandas, los médicos amenazan con continuar con acciones de protesta incluso durante el Campeonato Mundial de Fútbol a celebrarse del 3 de junio al 3 de julio próximos.

Situación precaria

"En comparación con otros países vecinos, en Alemania los médicos perciben los salarios más bajos", dijo a DW-WORLD la doctora de origen español Aicha Charimo. La situación ha provocado ya un cierre de un 10% de hospitales durante los últimos años. "Casi todos los médicos se ven obligados a trabajar horas extras para enfrentar las fuertes cargas de trabajo", señala. Según Charimo hasta el momento se han acumulado 50 millones de horas extras sin pagar, además, "las largas jornadas de trabajo vuelven la profesión incompatible con la vida familiar y social", añade.

Charimo, quien realiza una especialización en cirugía infantil afirma que la falta de perspectivas y buenas condiciones de trabajo ha provocado una sostenida fuga de profesionales. "Muchos estudiantes huyen al extranjero en busca de mejores oportunidades o buscan alternativas en la industria farmacéutica", explica.

Alto rendimiento a precio dumping

"No queremos seguir desempeñando una labor que requiere altos rendimientos a un precio dumping", subrayó el presidente de la Asociación Nacional de Médicos (Bundesärztekammer) Jörg -Dieter Hoppe. "No somos trabajadores baratos ni tampoco se puede responsabilizar a los médicos del déficit existente en nuestro sistema de salud", afirmó. El facultativo denunció los planes del gobierno federal de ahorrar unos 1.300 millones de euros anuales en el sistema de salud. Un nuevo lineamiento aprobado por el gobierno en coalición de cristianodemócratas y socialdemócratas prevé una reducción de honorarios a aquellos médicos que receten medicinas "caras". Los médicos se rebelan a ello señalando que la medida refleja una mentalidad de avaricia a costa de los enfermos.