Museos curiosos
Entre los aproximadamente 6.300 museos que existen en Alemania hay también algunos muy peculiares. Aquí les presentamos nuestros favoritos.
Mucho más que higiene
El nombre engaña. El Museo Alemán de la Higiene, en Dresde, ofrece mucho más que artículos de limpieza. Hay figuras que explican las funciones del cuerpo y piezas históricas que reflejan los avances científicos: desde la silla de partos de los mayas hasta modernas cámaras térmicas.
Mundos diminutos
Más de 1,2 millones de visitantes admiraron en 2013 el maravilloso Mundo en Miniatura. Desde Las Vegas hasta los fiordos de Noruega, todo está reproducido allí con esmerado detallismo. En una superficie de 1.300 metros cuadrados hay edificios, trenes, barcos, personas y automóviles, algunos de los cuales incluso se mueven. Esta atracción de Hamburgo es la mayor muestra de modelismo de Europa.
Vudú en Essen
El museo "Soul of Africa" está dedicado a la cultura del vudú, la magia y las artes medicinales de África occidental. El altar de la foto muestra a Mami Wata, una diosa del mar, junto a otros 41 espíritus del agua. El museo atrae mágicamente a unos 4.000 visitantes al año. Este año se proyecta incluso una ampliación.
Percepción a oscuras
Antes de entrar al museo, los visitantes reciben un bastón para ciegos. Entonces, guías no videntes los conducen por seis salas oscuras, donde se simulan situaciones cotidianas. Solo aromas, temperaturas, viento y sonidos ofrecen orientación. En el restaurante anexo, "Dinner in the Dark", se sirven los menús en absoluta oscuridad.
Pesado lastre
El tema de la guerra demanda en Alemania un trato especialmente sensible. El Museo Alemán de los Tanques, ubicado en Münster, presenta un análisis crítico de la historia militar. Muestra más de 150 vehículos blindados, entre ellos éste, de 1921, utilizado durante la República de Weimar por la policía en enfrentamientos callejeros.
Historia terapéutica
El Museo Alemán de la Farmacia, ubicado en el castillo de Heidelberg, muestra la mayor colección de objetos relacionados con el quehacer terapéutico del país. Las piezas expuestas abarcan 2000 años de historia farmacéutica, entre ellos botiquines de primeros auxilios, o incluso una farmacia completa, como esta del convento benedictino Schwarzach, del año 1742.
Bajo tierra
El Museo de la Minería, ubicado en Bochum, consta de una red de túneles de más de 2,5 kilómetros y es el mayor del mundo en su tipo. Los visitantes se enteran allí de todo lo realtivo a la la historia minera. En una cámara subterránea, las parejas pueden casarse. El brindis se hace luego en una torre de extracción, con una vista panorámica de la región del Ruhr.
Historia tributaria
¿Quién podría pensar que los impuestos tienen algo de divertido? En Brühl se encuentra el único museo alemán de los impuestos. Allí los visitantes pueden enterarse de la historia tributaria, desde la Mesopotamia hasta el día de hoy. Es una exposición informativa, no carente de humor.
Museo de la muerte
Carrozas fúnebre, ataúdes, tumbas desde la Edad Media hasta hoy. Todo eso puede encontrarse en el Museo de Cultura Sepulcral de Kassel, donde se explican también rituales funerarios alemanes. Como lo demuestra el ataúd de la foto, con forma de gallo, también la muerte puede tener un lado risueño.
La papa
Bienvenidos un museo único en el mundo según su directora, Barbara Kosler: el museo del arte de la papa, en Múnich. En ocho salas se exponen allí desde vasijas de cerámica incaicas con forma de papa hasta grabados coloridos estilo pop-art, pasando por muestras de su importancia como alimento.
El arte de la cerveza
¿Qué ofrece el museo de la cerveza y de la Oktoberfest? Por supuesto pruebas de la bebida nacional alemana. Los visitantes pueden aprender también algo sobre el arte cervecero y apreciar herramientas históricas e incluso las instrucciones manuscritas de una cervecería muniquesa del año 1487. El museo se ubica en la casa más antigua de Múnich, construida en 1340.