Música en Bolivia, un futuro mejor para los niños
Las escuelas de música florecen en diversos pueblos del este de Bolivia. La enseñanza musical cada vez es más valorada y reconocida y los niños sueñan con un futuro profesional como intérpretes o profesores.
Música para el futuro
‘Paz y Bien’ es una escuela de música impulsada por una parroquia franciscana en San Ignacio de Velasco. El sacerdote polaco Adalberto Mazur explica que las clases de música ayudan a los niños no solo a familiarizarse con esta disciplina artística, sino también a ponerse objetivos en la vida y a tener habilidades sociales y disciplina.
Grandes objetivos
Román Arirepia practica el violonchelo en la escuela de música de Urubichá, un pequeño pueblo de la región. Su sueño es formar parte de una gran orquesta internacional.
Un refugio musical
Urubichá es un pueblo del Amazonas solo accesible por caminos no pavimentados y sede de una de las escuelas de música más famosas de Bolivia. La iglesia ofrece la infraestructura, el Gobierno paga los salarios de los profesores y la municipalidad hace donaciones.
En clave de vida
Esta niña de 9 años, Olga Papu Claure, es una pianista muy talentosa de Urubichá. Durante un concierto en Santa Cruz conoció a un profesor de música estadounidense, que, impresionado por su talento, envió un piano de EE.UU. hasta Bolivia. Desgraciadamente, los insectos se comieron la madera y el instrumento quedó casi inutilizable.
Futuro profesional
La escuela de música de Urubichá está muy bien considerada. Muchos de los estudiantes que aprueban sus exámenes se convierten en músicos profesionales o profesores de otras escuelas de música en Chiquitania.
Más fondos
Hay 6.689 niños inscritos en la escuelas. Muchos de ellos sueñan con convertirse en músicos. El presidente Evo Morales apoya estos centros y quiere dedicar más fondos a las artes, la música y las tradiciones. En las áreas rurales, la enseñanza musical cada vez está más reconocida y valorada.
Orquesta en la iglesia
Todos los pueblos tienen coros y orquestas que tocan en fiestas locales y actúan en ciudades vecinas. La de imagen es una orquesta local tocando en la iglesia de Concepción.
Partitura antigua
Esta partitura original del siglo XVII se conserva en el archivo de Concepción. Solo los investigadores pueden sacar copias digitales del original.
Un respiro musical en hamaca
Santa Ana es un lugar pequeño que tiene su propia escuela de música. Por la noche se escuchan violines tocando en las calles o en las casas, cuando los niños practican sus instrumentos.
Lutier en la región
Samuel Cruz Tancara construye violines basados en modelos europeos. Utiliza maderas tropicales que resisten bien la humedad y el calor de Concepción. Originario de La Paz, Tancara empezó en el negocio hace seis años. Aprendió el oficio observando y experimentando. "Los primeros violines sonaban horribles", dice a DW.