“La economía mundial se desliza hacia una nueva zona de peligro”
3 de septiembre de 2011"La crisis financiera en Europa se ha convertido en una crisis de la deuda soberana, que tiene consecuencias graves sobre la unión monetaria, los bancos y la competitividad de algunos países", dijo Zoellick durante un discurso pronunciado en Pekín, la capital china.
El presidente del Banco Mundial reconoció que su país, Estados Unidos, "debe limpiar los problemas con sus deudas y gastos y reformar el sistema fiscal para promover el crecimiento el sector privado".
"Pero vivimos en una economía globalizada. Las decisiones en Europa, en Estados Unidos o en China nos afectan a todos", agregó.
“Una fase nueva y más peligrosa”
Por otro lado, Zoellick señaló que China necesita reformas para construir una "sociedad armoniosa, moderna y con ingresos altos. Si el país continúa en su elevada senda de crecimiento, en 2013 tendrá una economía equivalente a 15 veces la de Corea del Sur de hoy, teniendo en cuenta los precios de mercado".
"Resulta difícil pensar cómo esa expansión podría acomodarse a un modelo de crecimiento guiado por la inversión y las exportaciones", añadió. Así, el presidente del Banco Mundial está de acuerdo con otros expertos que afirman que China debe expandir su consumo doméstico, mejorar la eficiencia y reducir la brecha económica entre sus poblaciones rural y urbana.
La economía mundial está entrando en "una nueva y más peligrosa" fase debido a la crisis de deuda en Europa, había advertido ya el presidente del Banco Mundial en una reciente entrevista con el diario "The Australian".
Las preocupaciones por la deuda europea son mucho más graves que las que hicieron rebajar la calificación de la deuda estadounidense, consideró. "Estamos en los primeros momentos de una tormenta nueva y diferente, no es la misma que en 2008", advirtió.
Una recuperación problemática
"En los últimos años el mundo se ha movido de una recuperación problemática a múltiples velocidades -con los mercados emergentes y algunas economías como Australia creciendo y los mercados en desarrollo luchando- a una fase nueva y más peligrosa".
Las tasas de interés están en bajos históricos en el mundo desarrollado, lo que significa que a los bancos centrales no les queda margen de actuación en sus políticas monetarias.
Además, los gobiernos se endeudaron para financiar medidas de estímulo económico y tendrán que pedir prestado para financiar más. "La mayoría de los países desarrollados agotaron su espacio fiscal y su política monetaria es tan flexible como podía ser", señaló.
Zoellick dijo que la acción de la Unión Europea no tuvo el efecto deseado. "La lección de 2008 es que cuanto más tarde se actúe más hay que hacer".
dpa
Editor: Pablo Kummetz