1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Funeral terminó con choques entre palestinos e israelíes

25 de febrero de 2013

La muerte de un prisionero aparentemente por torturas a manos de las fuerzas de seguridad de Israel ha enardecido los ánimos en Cisjordania.

https://p.dw.com/p/17lic
Imagen: Hazem Bader/AFP/Getty Images

La muerte, en circunstancias poco claras, de un ciudadano palestino de 30 años que estaba preso en una cárcel israelí por lanzar piedras, ha enardecido los ánimos en Cisjordania, llevando a temer una tercera Intifada. La autopsia demostraría que Arafat Yaradat fue torturado hasta la muerte, algo que niegan las autoridades de Israel.

El entierro de Yaradat, al que concurrieron más de 25.000 personas, fue una demostración del malestar que se enciende entre los palestinos cada vez que fallece uno de los suyos. El joven fue sepultado en Sair, cerca de Hebrón. La esposa de Yaradat está embarazada y juntos ya tenían dos hijos.

Durante el acto se oyeron disparos, lo que alertó a las fuerzas de seguridad israelíes. Yaradat estuvo seis días detenido antes de morir, según las autoridades israelíes como consecuencia de un ataque cardíaco. Su cuerpo fue trasladado cubierto con una tela verde durante el cortejo fúnebre.

Frustración palestina

Tras el funeral hubo enfrentamientos entre palestinos y las fuerzas de seguridad, que lanzaron gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes. "¡Sacrificamos nuestras almas y sangre por ti, nuestro mártir!", gritaron los dolientes, algunos de los cuales llevaban sus caras cubiertas.

Esto se suma a otras protestas masivas palestinas que desde hace días se registran en Cisjordania para exigir la puesta en libertad de presos en huelga de hambre desde hace meses, lo que llevó al jefe de gobierno israelí, Benjamin Netanyahu, a pedir al presidente palestino, Mahmud Abbas, que restablezca el orden.

Las fuerzas militares israelíes dijeron que decenas de palestinos arrojaron piedras contra soldados este lunes (25.02.2013) en varias partes de Cisjordania. La frustración palestina ha sido alimentada por la expansión de asentamientos israelíes en Cisjordania, un proceso de paz estancado desde el 2010 y una división persistente entre la Autoridad Palestina del presidente Mahmoud Abbas y los islamistas de Hamas, que controlan la Franja de Gaza.

DZC (Reuters, dpa)