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Francia-Suiza 3 a 1: la rebelión exitosa

pk21 de junio de 2004

En la concentración del actual campeón europeo, las estrellas se rebelaron. Zinedine Zidane y Marcel Desailly le exigieron imperativamente al técnico un cambio de sistema. Con éxito: Francia ganó al final holgadamente.

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Todos detrás del balón. Suiza, eliminada.Imagen: AP

Zidane tiene que jugar inmediatamente detrás de las puntas de lanza, razonaron los jugadores, que dijeron hablar “en nombre del equipo”. Sólo así se puede aprovechar su potencial ofensivo, agregaron, y la tarea de Zidane como lateral izquierdo debe asumirla Robert Pires, para darle más impulsos el seleccionado francés.

Un equipo frustrado

Una hora y medio discutieron Zidane y Desailly con el coach en su cuarto de hotel. A “Zizou” lo apoyaron los atacantes del favorito: “creamos pocas posibilidades de gol y eso frustra”, se quejó David Trezeguet, que en el 2 a 2 contra Croacia logró el único gol de un atacante francés antes de este partido contra Suiza.

Santini, que en sus casi dos años en funciones sólo perdió un partido con el seleccionado francés, sintió la presión. La opción era clara: o bien seguía con su táctica, desafiando a las estrellas o abandonaba sus convicciones y arriesgaba perder su autoridad. “L’Equipe“ tituló: “la decisión está en manos de Santini”.

Las estrellas se imponen

Santini cedió. En el equipo volvió a jugar también Bixente Lizarazu, hasta ahora sólo suplente. Contra Suiza, el defensa izquierdo volvió al seleccionado, a reforzar el hasta ahora lado débil del defensor del título.

En la primera mitad, todo ello sirvió de poco. Si bien los galos abrieron el tanteador con un gol de cabeza de Zidane en el minuto 20, los suizos igualaron seis minutos después, con un hermoso tanto de Vonlanthen.

Pero todo cambió en el segundo tiempo. Si bien no jugaron espectacularmente, los galos sí lo hicieron con gran eficiencia. Henry en el minuto 76 y nuevamente en el 84 puso las cosas en su lugar. No obstante, los galos no convencieron, no funcionaron como equipo, sino que se confiaron en las habilidades individuales de sus estrellas.

Al final esas habilidades se impusieron y la victoria fue holgada, pero ¿bastará para doblegar también a una empeñosa, obstinada y hasta ahora exitosa Grecia en el próximo partido?