El Likud da la espalda a Sharon

El diario conservador español ABC opina: "El «no» rotundo de su partido, el Likud, al plan de evacuación civil y militar unilateral de Gaza sitúa al primer ministro israelí, Ariel Sharon, en una encrucijada de la que pretende salir de la misma forma en que ha gobernado hasta la fecha: el salto hacia adelante y la escalada de la tensión. Sharon está decidido a abandonar Gaza y evacuar, por las buenas o por las malas, a 7.500 colonos en tierra hostil, los mismos colonos de los que fue el héroe y salvador. El emblemático y vehemente ex general buscará en la Knesset, la Asamblea parlamentaria, el apoyo que le negó el pasado domingo su partido. Y, paradójicamente, será muy probablemente la oposición laborista la que le saque del atolladero en que se ha metido. (...) La situación actual ofrece la paradoja de un Sharon convertido en «paloma» dentro de un Likud radicalizado, y más cercano que nunca de su rival político Simón Peres, partidario decidido de la evacuación unilateral de Gaza, aunque con un desarrollo posterior probablemente bien distinto que el que se atribuye al veterano general. Todo cabe en el arsenal táctico de Sharon, amante de maniobras insospechadas, de conspiraciones políticas y de la escalada de la tensión."

Error de cálculo

El periódico romano Il Messagero analiza la posición de los colonos en los asentamientos israelíes y apunta: "Ariel Sharon se cuenta entre los creadores de ese monstruo que es el movimiento de los colonos; y ahora ese monstruo se ha vuelto en su contra, lo ha vencido y humillado. El primer ministro israelí no había contado con un triunfo tan claro de la derecha en la votación celebrada dentro del Likud. (...) Scharon calculó mal la resistencia de los colonos y no tenía claro en qué medida éstos han tomado posesión de parte de su partido. Pero el juego no ha terminado para el ex general, aunque el camino no será fácil".

Peor imposible

En Alemania, el matutino General Anzeiger, de Bonn, señala que los planes unilaterales de Sharon han resultado ser puro ruido. "Israel no se puede retirar de la Franja de Gaza y desentenderse allí de los palestinos, al menos de acuerdo con la voluntad de los miembros del Likud. Pero Sharon se ha apartado de su partido y éste, a su vez, de la población. Un jefe de gobierno sin seguidores; un ex general sin soldados; un partido sin pueblo: peor no podría haber sido el resultado de la 'impresentable' votación de los miembros del Likud."

Fallida jugada de póker

El rotativo holandés De Telegraaf coincide con esa apreciación e indica que "Ariel Sharon jugó al póker y perdió. El 'Sharon de teflón' al que le resbalaban todos los problemas, tiene ahora el resultado. (...) Ahora es un hombre sin autoridad, que ni siquiera tiene bajo control a su propio partido. La debacle acaba también con un mito largamente alimentado por Sharon: que sólo el partido Likud puede lograr la paz, porque es el único que está en condiciones de hacer entrar en razón a los colonos.