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El Kaiser y el rey Salomón

Emilia Rojas Sasse16 de febrero de 2006

Franz Beckenbauer, jefe del Comité Organizador del Mundial de Alemania, ha derrochado buenos augurios para las selecciones de los países visitados en su gira por América Latina.

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Intercambio de camisetas al más alto nivel: Beckenbauer y Kirchner.Imagen: picture-alliance/ dpa/dpaweb

Hace ya tiempo que Franz Beckenbauer cambió los zapatos de fútbol por los de charol y el lenguaje de la cancha por el de los salones. El 'Kaiser' se ha convertido en todo un diplomático. Sabe negociar con astucia y firmeza, como cuando consiguió que Alemania fuera escogida como anfitriona para el Mundial 2006. Y también sabe lisonjear a sus interlocutores, como lo ha demostrado ampliamente por estos días, durante su recorrido por varios países sudamericanos que estarán compitiendo a partir del 9 de junio por la Copa del Mundo.

Brasil y Argentina

Admitir que Brasil es su favorito para quedarse con el trofeo no exige mayor osadía visionaria, en vista de la trayectoria del equipo del que, a fin de cuentas, también terminan enorgulleciéndose los latinoamericanos en general cuando sus propios equipos van quedando rendidos a lo largo de las distintas etapas de los torneos mundialistas. Ese es el caso de la mayoría pero, por cierto, no el de los argentinos que, con méritos históricos y tradicional autoestima, entran siempre a la cancha resueltos a triunfar.

Por lo tanto, en suelo porteño, el Kaiser fue salomónico: "Brasil y Argentina son los mejores equipos del mundo", afirmó en la presentación que hizo en Buenos Aires de lo que será este Mundial 2006, que no en vano tiene el lema de "el mundo entre amigos". Varios amigos se habrá ganado desde ya, al derramar loas para el fútbol albiceleste y asegurar que la selección argentina es la favorita para ganar el primer lugar en su grupo de primera fase, por cierto bastante duro.

Paraguay y Ecuador

También a los paraguayos les vaticinó Beckenbauer buenos resultados en la primera ronda aunque, con un toque de realismo que a nadie puede incomodar, vaticinó que los guaraníes se clasificarán como segundos del grupo, detrás de Inglaterra. Decir lo contrario probablemente habría ofendido los sentimientos de Beckham y eso no estaría bien en esta campaña destinada a forjar amistades en el mundo entero.

Ecuador tampoco se quedó atrás en los vaticinios optimistas. El jefe del Comité Organizador del Mundial 2006 aventuró que "Ecuador va a ganarle a todos, menos a Alemania", lo cual es lógico, considerando que el corazón de Beckenbauer todavía late con especial fuerza por su propio equipo, por mucho que se haya convertido en embajador global. Pero tampoco allí le faltó una fórmula para dejar a todos felices: "podemos apostar al empate y así clasificarnos los dos para los octavos de final", sugirió este moderno Kaiser Salomón.