El caso Jodorkovski opaca a Rusia

Gazeta Wyborcza, de Varsovia: “El caso Jodorkovski deja a mal a Rusia y su mundo de los negocios. El caso le ha enseñado que empresarios que deben obedecer y compartir (sus ganancias) con las autoridades y apoyar tanto sus programas como sus humores privados, sin involucrarse en la política. Jodorkovsi no quiso seguir estos consejos y por eso ahora está en la cárcel y Rosneft ha absorbido su empresa Yukos. Rosneft es una empresa que es controlada por amigos de Putin. La sentencia, en el caso de Jodorkovski, dará una respuesta a la pregunta:¿Qué dirección está tomando Rusia? Seguirá el camino que el enemigo de Jodorkovski, es decir Putin, ha designado o elegirá un nuevo trayecto, del cual Medvedev está hablando.”

Berlusconi divide a los italianos

La Republicca, de Roma: “Al final, se notó sólo la violencia en un día en el que miles de personas se manifestaron pacíficamente por motivos comprensibles y fundados: las víctimas del sismo de L’Aquila por su derecho a reconstrucción, los napolitanos dañados por los desechos y su derecho a la salud, y los estudiantes por su derecho a un futuro. (…) La violencia de ayer ocultó la única verdad en el humo de carros encendidos y es que, a pesar de su victoria estrecha en el parlamento, el gobierno de Berlusconi hasta el día de hoy no ha sido capaz de darle a una Italia sufriente y frágil las respuestas necesarias en tiempos de crisis. Es ésta la Italia que ayer, junto con la ciudad de Roma, pagó el precio más alto.“

Holbrooke fracasó en Afganistán

Information, de Dinamarca: “Debe de haber sido una ironía increíble para Richard Holbrooke comenzar su trabajo para el Ministerio de Exteriores de los EE.UU. en 1962 en Vietnam y haber terminado como delegado diplomático del presidente Barack Obama para asuntos civiles en Afganistán y Pakistán. Su carrera acabó de la misma manera como había empezado: como diplomático en medio de unas de las guerras de los EE.UU., sin esperanza. Las continúan tercamente pese a los movimientos de resistencia nacionales hasta que la propia población se harta y comienza la retirada. (…) Holbrooke trató hasta el final de transformar la intervención del militar en Afganistán convirtiéndolo en apoyo civil, sin que hubiera progresos significativos. (…)Ni un diplomático de su experiencia y habilidad pudo con este hueso duro de roer.”

Críticas a “circo televisivo de político alemán en Afganistán”

Berliner Morgenpost, de Alemania: “Hay suficientes razones por las cuales se puede discutir sobre la intervención del Ejército Alemán en Afganistán. Lo que no pertenece a este serio repertorio de debates es una de las, de todos modos numerosas, visitas del ministro de Defensa a las tropas, o si lleva a su esposa y por mí incluso hasta a un moderador de televisión. Con gran certeza, los soldados presentes sobrevivirán las dos cosas sin ningún daño. La mayoría de ellos le dará la bienvenida a este “teatro” para distraerlos. De hecho no hay muchas distracciones en Kunduz. Las señoras y los señores Roth, Gysi, Gabriel pueden, con mucho gusto, volver a la realidad, tal vez también a esos “talkshows”, en los cuales ellos mismos son huéspedes habituales- pero no el ministro de la Defensa ni tampoco su esposa. La conmoción artificial sobre la propia puesta en escena y ambiciones políticas recaerán en ellos mismo pasado mañana.”

JW

Editor: José Ospina-Valencia