"Dar una perspectiva europea a Ucrania"
10 de marzo de 2005
DIE WELT, de Berlín, escribe: "Alemania está interesada en Estados estables y democráticos a lo largo de la frontera con Rusia. Sin embargo, poco ha hecho después de la ampliación de la Unión Europea hacia el este para lograr ese objetivo. Es hora de recuperar el tiempo perdido. Ucrania necesita una perspectiva europea, que puede culminar con una asociación privilegiada a la UE. Sólo dentro de algunas décadas se podrá conversar sobre un eventual ingreso a la Unión. Excluir no se puede, teniendo en cuenta que hasta la no europea Turquía inicia negociaciones de ingreso".
Desbancó a la nomenclatura
El AACHENER ZEITUNG, de Aquisgrán, opina: Yuschenko, que acaba de desbancar pacíficamente a la antigua nomenclatura no comete el error de caer en la impaciencia. No fija un cronograma preciso, sino que habla de pasos consecuentes para acercar a su país a la Unión europea. No pone bajo presión de fechas a nadie, pero apela a la perspectiva histórica y dice a los diputados del Bundestag: "¡No hay nada imposible!". Para probarlo nada mejor que la propia persona del orador, que sobrevivió un ataque con veneno del servicio secreto y ganó las elecciones contra todas las resistencias, represalias y calumnias. En realidad no tenía chance alguna, pero la supo aprovechar".
Agradecimiento por apoyo moral
El FRANKFURTER ALLGEMEINE ZEITUNG, de Fráncfort, opina: "Con el agradecimiento a Alemania por su apoyo moral, el presidente subrayó su expectativa de que Alemania no tarde mucho en reconocer la necesidad de una perspectiva europea para Ucrania. Habrá que ver si quienes tan fuertemente aplaudieron la libertad de viaje conceden a Ucrania por lo menos lo que hace ya tiempo dieron a Turquía".
Raíces profundamente europeas
El diario OSTSEE-ZEITUNG, de Rostock, escribe: "Con su adhesión a Europa y simultáneamente a Rusia como socio eterno, el presidente ucraniano demostró en el Bundestag ser tanto un político realista como un excelente diplomático que construye puentes entre el Este y Occidente. Sin duda, la senda de Ucrania a la Unión Europea es muy larga. Económicamente, también después de la Revolución Naranja el país continúa siendo fuertemente dependiente de Rusia. El nuevo gobierno debe atenuar las profundas diferencias entre los grupos de población prooccidentales y pro Rusia. La economía, dominada por unos pocos clanes, debe ser modernizada y se debe poner coto al crimen, el despilfarro y la corrupción. Será una difícil prueba para una nación grande y antigua, con raíces profundamente europeas."