Corrupción a la carta

El empresario de Fráncfort, Moritz Hunzinger es consejero de empresas de armamento y tiene estrechos vínculos con numerosos políticos alemanes. "Es un vendedor de contactos, que reparte dinero a diestra y siniestra y utiliza las relaciones públicas como escudo para cubrir la función de intermediario entre políticos prominentes y los grupos de presión de controvertidos sectores como la industria de armamento," afirma la Asociación alemana de agencias de relaciones públicas, GPRA, que se distancia de la empresa de Hunzinger y se queja de que éste ha ensuciado la reputación de todo un sector de servicios.

El escándalo que provocó la destitución del Ministro de Defensa Rudolf Scharping, se extiende ahora a numerosos políticos alemanes, poniendo en tela de duda la integridad de toda la clase política a dos meses de las elecciones generales. Moritz Huntziger, propietario de una agencia de relaciones públicas con sede en Fráncfort, es miembro de la Unión Cristiano Demócrata (CDU) y ha hecho donaciones en metálico prácticamente a todos los partidos representados en el Bundestag, el parlamento alemán.

En la mira de la justicia

Lo que costó a Scharping el puesto de Ministro de Defensa fue el haber recibido de la agencia de Hunzinger un total de 71.000 euros en los años 1998 y 1999, como anticipo por la publicación de sus memorias y como honorarios por tres conferencias pronunciadas antes de ser Ministro. Según la legislación alemana, los Ministros no pueden recibir honorarios paralelos a sus ingresos oficiales, y como diputado, todo ingreso que rebase los 15.000 euros, debe ser reportado ante el presidente del parlamento. Ahora el escándalo afecta también al diputado del partido de los verdes, Cem Özdemir, quien recibió de Hunzinger un crédito blando de 40.000 euros.

Aunque el joven y carismático diputado de origen turco, en principio no violó ningún reglamento, si ha quedado en una posición comprometida. Özdemir ha tratado de explicar el traspié afirmando que se había excedido gastando en ayudas a organizaciones diversas y amigos, y no calculó bien lo que le tocaría pagar de impuestos. El diario sensacionalista Bild, se pregunta si Özdemir es tonto o avaricioso. "Quien predique moralidad, debe estar totalmente limpio", afirma el diputado democristiano y experto legal, Wolfgang von Stetten, quien exhorta a Özdemir a retirar su candidatura de diputado de cara a las elecciones. Sin embargo la CDU no está libre de culpa. Entre sus filas también se encuentran destacados dirigentes que han hecho lucrativos negocios con Huntzinger, como el primer ministro del estado de Hessen, Roland Koch.

La clase política afectada

Según el diario alemán "Die Welt", Hunzinger hizo cuatro grandes donaciones a la CDU entre 1992 y el 2000, por un total de 140.000 euros, así como numerosas sumas de un monto menor a los 10.000 euros por lo que no son obligatorias de registro. También la hermana bávara de la CDU, la Unión Social Cristiana (CSU), recibió más de 92.000 euros, el partido de los verdes unos 20.000, mientras que el partido liberal (FDP), 65.000. El único partido que no ha recibido donativos es el partido de la democracia socialista(PDS), el partido gobernante de la ex-Alemania comunista.

Según el experto legal, Hans Herbert von Arnim, el empresario utiliza los métodos más refinados de los grupos de presión. Su sistema se basa entre otras cosas, en explotar la vanidad y las debilidades de políticos, para permitir el acceso de la industria a la política. "Hunzinger asesora a políticos en como vestirse y mejorar su aspecto físico, hasta la publicación de libros, y otros aspectos de su vida, incluyendo sus relaciones amorosas. El caso de Scharping refleja claramente, el amplio margen de maniobra del empresario. El político socialdemócrata conoció a su novia, la condesa Kristina Pilati, por un amigo común: Moritz Hunzinger.

Endurecimiento de leyes

El ejecutivo ayudó a Scharping durante la campaña a favor de la intervención de Alemania en Kosovo y después, le recomendó al Ministro a la mejor abogada para tramitar su divorcio. La condesa letrada, quien tiene el título nobiliario de su primer marido, el conde Pilati von Thassul zu Daxberg, es divorciada por segundas nupcias del banquero Hendrik Borggreve y ha separado a mas de 1.600 parejas en su trayectoria profesional.

El caso Hunzinger ha sacado a la luz, en plena campaña electoral, el controvertido papel del llamado ‘lobbyismo,’ la labor de los grupos de presión que sobre todo en Estados Unidos, representan abiertamente a grupos de intereses.

Ya que en el parlamento se encuentran representados los intereses de las distintas comunidades de la sociedad y sus respectivos intereses, para los diputados, los llamados 'Lobbys' son importantes fuentes de información. Sin embargo el experto von Arnim advierte que hay grandes lagunas en las leyes alemanas que permiten el abuso. Como consecuencia del escándalo, se espera un endurecimiento de las leyes para diputados, exigiéndoles que presenten detalladamente todos sus ingresos adicionales, actividades y participaciones en cualquier empresa. La nueva regulación entrará en vigor antes de las elecciones el 22 de septiembre.