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Condena internacional al asesinato de Yasín

cp23 de marzo de 2004

Se alzan voces de condena en Europa y en el mundo por el asesinato del líder espiritual de Hamas. Aumenta la preocupación por las negociaciones de paz israelo-palestinas, y se teme una escalada de violencia.

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El líder palestino de Hamas, asesinado por fuerzas israelíes.Imagen: AP

Múltiples críticas se hicieron manifiestas en los altos cargos de la Unión Europea después del asesinato del jefe del grupo militante palestino Hamas, el jeque Ahmed Yasín. La Unión Europea, además de rechazar abiertamente este tipo de "asesinato selectivo", recordó su posición de rechazo frente a los atentados terroristas de Hamas, que causaron la muerte de cientos de israelíes. Pero, asimismo, subrayó su preocupación por el atentado al líder espiritual Ahmed Yasín, ya que este hecho violento reaviva el conflicto y no sólo no aporta soluciones, sino que se prevé traiga nuevas e imprevisibles agresiones como consecuencia inmediata.

Según esta declaración, la Unión Europea reconoce el derecho de Israel a protegerse del terrorismo, pero no a realizar ejecuciones extrajudiciales. Javier Solana, el Alto Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, calificó la muerte de Yasín como una "muy mala noticia para el proceso de paz en Oriente Medio", e indicó que sería necesario que la UE juzgara este asesinato de manera especialmente estricta. Mientras tanto, Ariel Sharon declaraba que "la guerra contra el terrorismo" continuaría "todos los días, en todas partes".

Condena europea

El Ministro alemán de Asuntos Exteriores, Joschka Fischer, indicó que el gobierno germano está "sumamente preocupado por los acontecimientos". Si bien la actitud de Fischer fue reservada en un principio, dijo luego que "tanto el gobierno alemán como la Unión Europea han rechazado siempre este tipo de asesinatos, y los calificamos de inaceptables." Asimismo llamó a las partes a hacer todo lo posible para evitar una escalada de violencia.

Por su parte, Dominique de Villepin, Ministro francés de Exteriores condenó explícitamente el asesinato de Yasín, y advirtió que "dichos actos sólo sirven para alimentar la espiral de violencia, en momentos en que resulta tan importante reafirmar el proceso de pacificación de Oriente Medio".

Su homólogo de Gran Bretaña criticó severamente la muerte del líder espiritual de Hamas, perpetrada por las Fuerzas Armadas de Israel, calificándola de "injusta, ilegal e inaceptable", además de afirmar que "es poco probable que Israel alcance de este modo sus objetivos". El Primer Ministro inglés, Tony Blair, dijo que lo sucedido es un claro paso atrás para las negociaciones de paz, y apeló a la moderación en Medio Oriente, indicando que el camino correcto es retomar el diálogo.

En Ciudad del Vaticano, el vocero del Papa Juan Pablo II dijo que el ataque que provocó el deceso de Yasín es "ilegal". "La Santa Sede se une a la comunidad internacional para deplorar este acto de violencia, que no puede ser justificado bajo ninguna ley", así Joaquín Navarro-Valls en el comunicado. Según Navarro-Valls, "una paz auténtica no puede nacer de un acto de fuerza".

En Polonia, el Ministro de Exteriores, Wlodzimierz Cimoszewicz, expresó su temor sobre la posibilidad de que el atentado a Yasín pueda incrementar el peligro terrorista en Europa. "La imagen de una persona atada a una silla de ruedas, que es asesinada por un misil, no es seguramente la mejor manera de reforzar la seguridad en Israel", dijo Cimoszewicz.

Por su parte, Rusia se muestra "profundamente preocupada" por la muerte de Yasín y expresó temor por el devenir de las tratativas de paz entre Israel y Palestina.

EEUU niega su participación

La consejera de seguridad nacional del gobierno estadounidense, Condoleeza Rice, declaró esta mañana en entrevistas televisivas que EEUU no recibió ningún tipo de advertencia acerca del atentado al jeque Ahmed Yasín, y negó categóricamente la participación de EEUU en el asesinato.

El mundo musulmán reclama venganza

En la comunidad musulmana y los países árabes se suman las condenas y reclamos de venganza, prediciendo respuestas inmediatas al ataque aéreo en el que se asesinó a Ahmed Yasín y a otras siete personas.

El presidente de Egipto, Hosni Mubarak, condenó los asesinatos y refirió que eran un "acto brutal que excede toda capacidad de imaginación". Mubarak dijo no poder prever las posibles repercusiones que tendría el atentado". Además, canceló la participación de Egipto en las celebraciones del vigésimo quinto aniversario del Tratado de Paz Egipcio-Israelí, a realizarse en los próximos días.

Irán habló de un "acto criminal" y un "claro ejemplo de terrorismo de estado". Irak, en la voz de Muaffak al Rubai, miembro chií del Consejo, condenó "este asesinato que sólo servirá para reforzar las justificaciones formuladas para realizar actos terroristas y no ayuda a la paz", según declaraciones hechas a agencias.