China confina segunda ciudad por nuevo brote de COVID-19
4 de enero de 2022
Las autoridades chinas decidieron el martes (04.01.2022) confinar partes de la ciudad portuaria de Ningbo, en la provincia oriental de Zhejiang, tras detectar un rebrote de COVID-19 que ha dejado 23 infecciones en los últimos días.
Se trata de la segunda ciudad china que pone en marcha un confinamiento este invierno tras la de Xi'an, que acumula 1.663 infecciones desde principios de diciembre del año pasado.
Los 23 casos detectados en Ningbo, de nueve millones de habitantes, se hallaron en un taller de confección, informa el periódico Global Times, y corresponden a la variante delta del coronavirus.
Por ello, las autoridades locales decidieron hoy que los residentes no podrán salir de sus casas en zonas específicas, como en el distrito de Beilun, mientras en otras áreas el movimiento estará limitado.
"De los 23 casos, 19 presentan síntomas leves y los otros cuatro, moderados. La fuente de infección es aún desconocida", indicó este martes un funcionario local de Ningbo, recoge la cadena estatal CCTV.
Destituyen a funcionarios de salud
Los contagios declinaron en la ciudad china de Xi'an, según datos oficiales divulgados el lunes, mientras las autoridades destituyeron a dos altos cargos para "fortalecer" la lucha contra la pandemia.
En Xi'an, en el norte de China y conocida por sus Guerreros de Terracota, el gobierno confinó a sus 13 millones de habitantes.
La ciudad reportó el lunes 90 casos nuevos de COVID-19, por debajo de 122 un día antes. Desde el 9 de diciembre ha registrado más de 1.600 contagios del virus.
"Hemos entrado en un estado general de ataque", declaró el dirigente provincial Liu Guozhong, según un comunicado oficial.
Xi'an anunció el domingo que dos cargos del Partido Comunista del distrito de Yanta fueron destituidos de sus puestos, dijo la prensa local, para "fortalecer el trabajo de prevención y control de la pandemia".
Unos 46 autobuses trasladaron este martes a 2.000 estudiantes del Colegio de Aviación de Xi'an, a las ciudades de Shangluo y Hanzhong, como parte del plan de aislamiento centralizado.
El órgano disciplinario chino anunció en diciembre que decenas de funcionarios fueron castigados en todo el país por "insuficiente rigor en prevenir y controlar el brote".
Pekín ha seguido una política de "cero COVID", con severas restricciones fronterizas y confinamientos focalizados desde que apareció el virus, pero la estrategia ha sido cuestionada con la proliferación de brotes recientes.
Habitantes de Xi'an dijeron a medios locales que han tenido dificultades para comprar alimentos, pese a que las autoridades chinas insisten en que trabajan para asegurar el abastecimiento.
El lunes, responsables del municipio aseguraron a los reporteros que se habían enviado recursos desde las zonas vecinas. "El distrito de Yanta es una zona densamente poblada y todavía hay una brecha entre nuestro trabajo y las necesidades de la gente", dijo el funcionario local Lu Dongguo.
China ha reportado niveles bajos de contagio comparado con otros países, pero en los últimos días registró niveles que el país no ha visto desde marzo de 2020. El aumento se da en momentos que Pekín se prepara para los Juegos Olímpicos de Invierno en febrero.
Última actualización a las 05:59 CET.
gs (afp, CNA, CCTV)