Austria: revitalizar la Constitución de la UE
9 de enero de 2006El canciller federal austriaco, Wolfgang Schüssel, actual presidente del Consejo Europeo, definió hoy este reto como uno de los principales objetivos de su periodo tras una reunión de trabajo con los miembros de la Comisión Europea, liderados por su presidente, el portugués José Manuel Barroso.
El jefe del Gobierno austriaco señaló ante la prensa en Viena que será "duro y difícil, pero no imposible reanimar"' la Constitución europea, cuyo proyecto fue rechazado el año pasado en sendos referendos en Francia y Holanda.
Schüssel dijo que el texto constitucional propuesto es mucho mejor que el Tratado de Niza, en vigor actualmente, que incluye "muchos elementos de procedimiento muy raros".
No está muerto quien pelea
'La Constitución no está muerta, pero tampoco está en vigor. Tenemos que intentar integrar más a los ciudadanos de Europa para averiguar cuáles son sus preocupaciones y las razones de algunas disconformidades", aseguró.
Por otra parte, el canciller austriaco anunció que el tema principal del primer Consejo Europeo, en marzo próximo, será el crecimiento económico y el empleo, ya que "eso es lo que más afecta a los ciudadanos europeos y lo que crea más expectativas".
'Vamos a centrar nuestro trabajo en el fomento de las pequeñas y medianas empresas, en la investigación y el desarrollo, pero también debemos ocuparnos de aquellos ciudadanos que no tienen un buena capacitación", añadió.
Schüssel destacó en este sentido a las pymes, que en su opinión son "el único motor de creación de puestos de trabajo en Europa, ya que pueden crear millones de empleos".
Las pymes: "las empresas más importantes"
Barroso, por su parte, coincidió con Schüssel al subrayar que las pymes son las empresas más importantes del continente. 'Con todo mi respeto hacia las grandes compañías internacionales que tenemos, las más importantes en Europa son las pequeñas y medianas empresas', dijo Barroso. "Por eso es tan importante salir adelante con nuevas ideas concretas para liberalizar las condiciones empresariales en Europa.
Hasta el segundo Consejo Europeo en junio, Barroso prometió una serie de ideas de la Comisión Europea, que serán compartidas con todos los 25 países de la UE. "Esas ideas incluirán todos los asuntos, tanto institucionales como sustanciales. No necesitamos un debate institucional sin políticas sustanciales", agregó. "Debemos mantener un debate sobre el futuro de Europa pero en el marco de una discusión más amplia", dijo el presidente de la Comisión.
"Nuestro programa para el futuro de Europa se centrará en modernizar y preservar Europa, nuestros valores y nuestro modo de vivir en el mundo globalizado", concluyó Barroso.
Schüssel mencionó en ese sentido que la segunda parte de su presidencia, o sea, después del Consejo primaveral, se centrará en un balance interno del debate sobre el futuro de Europa.
El canciller dijo que el debate se debe centrar "en el modelo de vida europeo", las fronteras de Europa, las responsabilidades de los estados nacionales y la reducción de la burocracia.
Austria rechaza "núcleo europeo"
Schüssel rechazó asimismo la creación de una "núcleo europeo", en el que sólo participan unos pocos países miembros de la UE y subrayó que su idea es "movilizar la energía, fantasía y las posibilidades todos los 25 países miembros" en ese debate.
Barroso añadió en ese contexto que la UE debe "evitar a toda costa nuevas divisiones sobre las instituciones (europeas)". "No necesitamos más líneas divisorias, necesitamos entregar a nuestros ciudadanos resultados concretos", insistió el presidente de la Comisión.
En cuanto a las perspectivas financieras de la UE para 2007-2013, Schüssel anunció que tras recibir la evaluación de la Comisión Europea, la presidencia austriaca quiere iniciar, todavía en enero, las negociaciones con el Parlamento Europeo. "Esperamos poder realizar un calendario ambicioso, sin largas esperas, para darle a los nuevos países miembros de la UE la posibilidad de participar en las nuevas perspectivas financieras", concluyó Schüssel.