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CatástrofesGlobal

Aumentan a siete los muertos por alud en Isquia

27 de noviembre de 2022

Los equipos de rescate siguen buscando a varios desaparecidos. El gobierno decretó el estado de emergencia y destinó una ayuda inicial de 2 millones de euros.

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Un bus en la costa de Isquia.
Incluso buses fueron arrastrados al mar por el deslizamiento.Imagen: ANSA/AFP

El balance provisional tras el deslizamiento de tierra de la madrugada del sábado en la isla italiana de Isquia (sur) ascendió este domingo (27.11.2022) a siete muertos, mientras prosigue la búsqueda de al menos otros cinco desaparecidos, confirmó el cuerpo de bomberos. El gobierno italiano decretó el estado de emergencia para facilitar las labores de ayuda.

Los equipos de rescate recuperaron esta jornada seis cuerpos, entre ellos el de un recién nacido, una niña de 5 o 6 años y el de una anciana, mientras que el sábado se encontró el de la primera víctima, identificada como Eleonora, de 31 años. La pareja de esta última figura entre los desaparecidos.

En las labores de búsqueda, en la que participan más de 200 miembros de protección civil y fuerzas de seguridad además de cientos de voluntarios, se usan perros para rastrear señales de vida bajo los escombros, mientras un barco de la Guardia Costera busca en el mar, donde fueron arrastrados numerosos coches y hasta autobuses. Los equipos de rescate se afanan en buscar señales de vida en la Vía Celario de Casamicciola, el barrio más perjudicado por el desplome.

Dos millones de euros en ayuda

Una primera ayuda de emergencia de dos millones de euros fue desbloqueada, tras una reunión extraordinaria del gabinete, necesaria para declarar el estado de emergencia, precisó el ministro de Protección Civil, Nello Musumeci. Italia decreta a menudo el estado de emergencia, después de sismos, erupciones volcánicas o fuertes lluvias, porque prevé un proceso acelerado para movilizar fondos y medios.

"Es una situación que nos duele, ya sólo por las personas desaparecidas bajo la montaña. Esto es una isla y aunque no nos conocemos todos, casi es así, al menos de vista", dijo a la agencia AFP Salvatore Lorini, de 45 años, un vecino de Isquia. "La montaña descendió, hubo una devastación de tiendas, coches, un hotel... y ya se había producido hace nueve años. Ahora estoy limpiando la tienda de mi abuela", explicó.

DZC (EFE, AFP)