Andar en bici por Brasil
Carril para bicis
Cada vez más políticos promocionan el uso de la bicicleta en las grandes metrópolis. Muchas ciudades están mejorando la infraestructura para los ciclistas. Uno de los líderes de este movimiento es la pequeña ciudad turística Balneário Camboriú, en el Sur del país.
El plan: 55 km de ciclovías en 2013
Por iniciativa pública, en la pequeña ciudad de 100.000 habitantes ya se han hecho 22 kilómetros de ciclovías. El plan prevé que este año la ruta crezca en más del doble. Sin embargo, en el Sur del Brasil, a muchos brasileños no les interesa utilizar la bicicleta como medio de transporte.
La mala fama de la bici
Muchos brasileños consideran la bicicleta como el medio de transporte de los pobres. La creciente clase media-alta compra cada vez más coches. Para muchos es el símbolo de estatus por excelencia.
Carril bici en lugar de aparcamiento
En la famosa Avenida Atlántica junto a la playa, en la conocida ciudad turística de Balneario Camboriú, los ciclistas pronto se podrán mover mucho mejor. Donde los coches aparcan hoy, pronto surgirá una ciclovía a lo largo de todo el paseo marítimo.
De la bici a las olas
Con seguridad, los surfistas se van a alegrar con la noticia. A menudo se mueven en bicicleta y llevan la tabla de surf ya sea bajo el brazo o, como en la foto, sujeta con un sistema especialmente diseñado.
Bicicletas y cultura
Muchas de las iniciativas, como la "Bicicletaria Cultural", tienen como objetivo promover la aceptación de la bicicleta por parte de la población. El creador del proyecto en Curitiba, Fernando Rosenbaum da, por ejemplo, clases para manejar bicicleta.
La bicicleta, un símbolo
Los esfuerzos parecen estar teniendo éxito: cada vez más curitibanos utilizan la ciclovía. Aunque todavía menos del 4% de la población de esta ciudad brasileña se monta en su bicicleta, ya para muchos se ha convertido en un icono, como en Europa.
Gracias a las bicis
Las políticas públicas responden a la creciente aceptación de la bici. Y también en Curitiba se construyen más ciclovías. Río de Janeiro tiene la red más grande que alcanza casi 300 km. Curitiba está en el tercer lugar, con una red que abarca aproximadamente 125 km. Esto beneficia tanto a los residentes como al medio ambiente.