Alemania recuerda ataques racistas de Rostock
25 de agosto de 2012Políticos y ciudadanos llegados desde todo el país marcharon por la ciudad hasta el centro de asilados donde se produjeron los incidentes.
El ayuntamiento de la ciudad descubrió una placa conmemorativa que también recuerda a los millones de judíos y gitanos víctimas del nazismo. El pueblo alemán tiene la obligación "de evitar que se repita la violencia y el desprecio al ser humano", dice la placa.
A fines de agosto de 1992, extremistas de derecha sitiaron un albergue de asilados vietnamitas en el barrio de Lichtenhagen. Tras dos días de asedio, el 24 de agosto terminaron por incendiar el edificio, ante la mirada de unos 3.000 curiosos que aplaudieron lo que ocurría. Unas 150 personas pudieron ser rescatadas a último minuto de las llamas y milagrosamente no hubo víctimas. Las imágenes, que según la propia prensa alemana recuerdan a los pogromos nazis, dieron la vuelta al mundo.
El incidente está considerado uno de los más graves ataques racistas desde la posguerra alemana. "El recuerdo de lo ocurrido en Lichtenhagen no puede borrarse", declaró la organización "20 años tras los progromos: el problema se llama racismo", que convocó los actos de conmemoración.
"Sin embargo, con esta manifestación colorida y combativa también queremos denunciar que hasta ahora no se aprendieron lecciones importantes de Lichtenhagen. Alemania y Europa no pueden aislarse. Necesitamos otra política de asilo".
Se espera que también el presidente Joachim Gauck, nacido en Rostock, participe en los actos oficiales de recuerdo.
Fuente: dpa
Editor: José Ospina-Valencia