1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Alemania lleva a cabo más controles fronterizos selectivos

17 de septiembre de 2024

Para poder gestionar mejor la migración irregular, se realizarán controles en todas las fronteras nacionales alemanas durante seis meses. ¿Qué supone esto para la población que vive y trabaja entre países?

https://p.dw.com/p/4kjNz
Control de policía en la frontera con Polonia.
Desde el lunes 16 de septiembre se realizan controles en todas las fronteras de Alemania.Imagen: Patrick Pleul/dpa-Zentralbild/picture alliance

Los controles ya son algo cotidiano en las fronteras alemanas con Polonia, la República Checa, Austria y Suiza, y ahora se han sumado también Francia, Bélgica, Luxemburgo, Países Bajos y Dinamarca. Las fronteras nacionales de Alemania vuelven a estar controladas desde el 16 de septiembre hasta el 15 de marzo de 2025. "Queremos reducir aún más la migración irregular, detener a los contrabandistas, a los delincuentes e identificar y detener a los islamistas en una etapa temprana", dijo la ministra federal del Interior, Nancy Faeser, del partido socialdemócrata SPD.

Alemania tiene más de 3.800 kilómetros de frontera. Hay una en el oeste, donde el tráfico suele fluir sin obstáculos en la carretera de un solo carril que conecta Vaals, en Países Bajos, con Aquisgrán, en Alemania.

Viajar sin fronteras

A la salida de Vaals se pueden ver señales de tráfico y carteles en varios idiomas. Por toda esta región se puede ir sin ningún problema en bicicleta por laderas y bosques entre Alemania, Países Bajos y Bélgica. Las instalaciones de control de fronteras ya no existen desde hace mucho tiempo. Numerosas carreteras y caminos conectan las ciudades y pueblos de la región fronteriza en torno a Aquisgrán.

Y, como si siempre hubiese sido así, en ese triángulo fronterizo hay alemanes que viven en Bélgica o Países Bajos y trabajan en Alemania y viceversa. Los autobuses cruzan fronteras y la gente va de compras a los países vecinos.

Controles flexibles en las fronteras

Para David Specks, portavoz de la Inspección de la Policía Federal de Aquisgrán, todo esto debería seguir siendo así. El Ministerio del Interior alemán ordenó controles "específicos, adaptados a la situación, flexibles en el lugar y el tiempo” y no controles "generalizados”.

Specks dio información sobre una estación de servicio en una autopista justo detrás de la frontera con Bélgica. Allí se posicionaron policías alemanes con chalecos protectores y metralletas. La Policía federal es responsable de los delitos en las fronteras y de la seguridad de los trenes y aeropuertos. Por su parte, la Policía de las diferentes regiones se posiciona en los vehículos de emergencia directamente en la frontera y vigila el tráfico. Si ve un vehículo que le parece sospechoso, puede seguirlo y guiarlo hasta el área de descanso, donde los ocupantes deberán presentar sus documentos, se inspeccionan los maleteros y superficies de carga.

Cartel en holandés y señal de tráfico en Alemán.
En las zonas fronterizas entre Alemania, Países Bajos y Bélgica, la gente está acostumbrada a cruzar las fronteras incluso diariamente.Imagen: Sabine Kinkartz/DW

Desafíos de personal en los controles fronterizos

Según los expertos, el lugar donde se realizan los controles depende de la experiencia fronteriza de la Policía. Las carreteras más pequeñas solo se controlan ocasionalmente, y los carriles bici casi nunca. 

Sin embargo, el énfasis en los controles aleatorios se debe principalmente a cuestiones de personal. Hace unos años, el sindicato de Policía calculó que, solo en la región de Aquisgrán, se necesitarían unos 900 agentes para poder controlar las 24 horas del día los pasos fronterizos más importantes. La Inspección de la Policía federal de Aquisgrán cuenta actualmente con unos 330 agentes, pero es responsable de una sección de la frontera que se extiende más de 200 kilómetros desde Aquisgrán hacia el sur. 

Controles impredecibles, incluso para los residentes

Con el personal actual no sería posible realizar controles fronterizos completos, como lo exige el mayor grupo de la oposición en Berlín, los partidos conservadores CDU/CSU, con el objetivo de rechazar al mayor número posible de inmigrantes.

El policía federal Specks no quiere revelar cuántos funcionarios hay: "Ahora podemos ir uniformados, pero también de civil, y podemos simplemente realizar más controles y volvernos más impredecibles para los delincuentes".

Pero los controles también son impredecibles para las personas que viven en la zona fronteriza, donde hay temor a quedarse atrapado en el tráfico durante horas en la frontera. 

(rmr/ms)