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Alemania: ¿líder pacifista?

14 de enero de 2003

Alemania reafirma su posición antibelicista mientras a nivel internacional se consolida un frente que condena toda intervención armada en Irak por parte de los Estados Unidos y sus aliados. Su "santo" patrón: Schröder.

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Una paloma con rumbo incierto.Imagen: AP

Schröder nunca se lo imaginó. Cuando durante la reciente campaña electoral anunció que bajo su mandato Alemania no participaría en ninguna guerra contra Irak, la oposición conservadora y liberal desató una verdadera avalancha de críticas y reprimendas que llegaron incluso a acusarlo de "traición a los Estados Unidos", el país que liberó a Alemania de la dictadura nazi. Los gritos al cielo de los opositores de la posición no tardaron en llegar a los corredores de la Casa Blanca. Y la temeraria ira de Bush tardó menos en hacerse sentir en Berlín.

Ecologismo a cambio de belicismo

El gobierno socialdemócrata y verde alemán fue calificado de "desagradecido" . La mujer halcón de los Estados Unidos, Condolezza Rice, habló de "desafueros inaceptables por parte de Alemania". Rumpsfeld, el Ministro estadounidense de Defensa, por su lado, se rehusó incluso a darle la mano a su homólogo alemán Peter Struck, durante reuniones de la OTAN en Praga y Varsovia.

Gerhard Schröder: ¿un traidor de la tradicional amistad germano-estadounidense? ¿Acaso otro de los villanos del eje del mal? Para nada, dice la reconocida columnista estadounidense Arianna Huffington que lidera una vasta campaña contra el uso de los coches todoterreno que tragan cualquier cantidad de gasolina. Huffington polemiza contra el boom de los descomunales, antiecológicos y antiestéticos "Sport Utility Vehicles" (SUVs) y "las inconsecuencias del gobierno de Bush que quiere emprender una guerra por petróleo y en los mismos Estados Unidos y no hace nada contra el despilfarro de gasolina".

"La guerra no es la respuesta"

El llamado "Detroit Project" ha recibido un abrumador apoyo por parte de la ciudadanía. No son pocas las luminarias de Hollywood que han despertado de su sueño sobre laureles para grabar campañas televisivas en favor del desperdicio de los recursos no renovables y en contra de la cacareada "necesidad de una guerra contra el dictador Sadam".

"El frente de opositores contra una probable guerra se ha extendido más allá de los grupos ambientalistas y los tradicionales sospechosos en el congreso, dice el diario USA Today. El Wall Street Journal, por su parte, habla de un "verdadero problema". Y la revista "New Republic" titula incluso "Eje del mal – La perversidad de los Estados Unidos con coches sociopatológicos. Esta alusión se refiere al uso comercial del SmarTruck II, un auto concebido para uso militar.

Pero no sólo en los mismos Estados Unidos crece el frente de opositores contra una probable guerra en nombre de la libertad. En la Gran Bretaña, el incondicional aliado de los Estados Unidos, sectores del partido laborista del primer ministro Tony Blair se han pronunciado en contra de una guerra que no sea avalada por las Naciones Unidas. La desaprobación de la posición belicista de Blair crece también en la Gran Bretaña en donde muchos comparten la idea de que el primer ministro ha degradado su función a la de una "marioneta" o un "perro faldero" de Bush.

Es mejor festejar que pelear

En las últimas horas y en la primera conferencia oficial de prensa de la cancillería, Gerhard Schröder reconfirmó en Berlín su simpatía por una segunda resolución de las Naciones Unidas, alabó la estrecha cooperación con Francia y destacó el espíritu pacifista de Alemania.

En la misma Alemania, en donde, según encuestas el 93 por ciento de la población está en favor de una solución pacífica al conflicto, crece la preocupación de que una probable guerra afecte las fiestas de fines de febrero. El lema de los renanos siempre ha sido el de que "lo que se debe cancelar no es el carnaval sino la guerra".

José Ospina Valencia