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Adelgazar por internet

26 de febrero de 2003

Muchos están inconformes con su peso. ¿Como adelgazar después de pasar el día entero sentado en la oficina y quedar extenuado en la noche ante el televisor? Se puede, afirma Britta Jahn: cliqueando por internet.

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La tenacidad es lo que cuenta.Imagen: Slimnet

La idea es simple pero funciona. La lógica ha sido comprendida por empresarios hace tiempo: si muchas personas buscan diariamente consejos para adelgazar en internet, hay que ofrecerles la solución por la misma vía. Quien ya haya probado infructuosamente desde el vinagre de manzana, hasta la dieta baja en azúcares, puede acceder a una dieta internet para experimentados.

Con ello no se alude a la venta de píldoras o a pócimas mágicas a través de la red, ni tampoco a una sesión exhaustiva frente a la computadora. Una dieta online significa buscar con la ayuda de mails, chats y foros, una estrategia clara para combatir el sobrepeso. Desde hace mucho existen páginas de aficionados que ofrecen consejos para bajar de peso. Pero ahora son las grandes empresas quienes se lanzan en franca ofensiva para conquistar el segmento de ayuda anónima y dietas personalizadas a través de la red.

Estados Unidos, país de contrastes

El ejemplo viene de Estados Unidos, no en vano es donde hay el mayor número de obesos y donde paradójicamente el ‚culto‘ al cuerpo se ha convertido en parte del estilo de vida. El ofertante online más exitoso, "eDiets.com", tiene ya casi un millón de usuarios. El paquete, diseñado y atendido por psicólogos, nutriólogos y médicos especializados en el deporte, tiene como lema ‚una alimentación sana‘ y sostiene que ésta máxima sigue teniendo vigencia. Una dieta personalizada que incluye hasta la lista de compras y asesoría con expertos cuesta al usuario 5 US dólares a la semana.

De mostrar tenacidad, a partir de la décima semana el usuario accede a una cuota de US 10 dólares al mes. Esto le da derecho a un servicio de asesoría las 24 horas al día, lo cual resulta muy útil en caso de que se despierte a las tres de la mañana con hambre y un arrebatador antojo de chocolate. En ese caso puede recurrir a los expertos online, quienes tratarán de disuadirlo con propuestas y alternativas para salir del paso.

Europa no se queda atrás

Una de las plataformas más exitosas es la dirección internet que atiende un Dr. Pudels. "Slimnet", es la página más exitosa especializada en el combate al sobrepeso en Alemania. Aquí el usuario no sólo es puesto a dieta sino que es literalmente "entrenado" a rechazar la comida chatarra y alta en calorías. También es sometido a una fuerte campaña publicitaria para que compre los productos que ofrece la casa. La marca "Delemi", ofrece todo tipo de alimentos bajos en calorías, desde el clásico platillo pre-cocinado hasta sopas y postres, que son ofrecidos constantemente a través de foros y chats.

El usuario puede recurrir a una gran oferta de ayuda: chats con expertos y otros compañeros de causa, cursos de entrenamiento semanales y respaldo a través de e-mails. La cuota de asesoría asciende a 12 euros al mes, pero la principal fuente de ingresos de la empresa proviene de la venta de sus productos bajos en calorías.

La nouvelle cuisine francesa

También los franceses luchan por ganar terreno. El líder del mercado galo se llama "LeDiet" y reporta hasta 700.000 interesados. Según información de la empresa, uno de cada cinco, tiene tras de sí una dieta de varios meses. El negocio marcha tan bien, que la página se ha expandido a los mercados de Canadá, Gran Bretaña, Alemania y Suiza. El usuario recibe semanalmente una canasta de productos alimenticios, que deben bastarle para sobrevivir hasta el domingo, pero en vez de cocinar recetas específicas puede combinar libremente los productos.

Incluso quien viaja constantemente puede elegir entre una docena de programas para bajar de peso, que puede almacenar en su lap-top. La mayoría de los "asistentes dietéticos" que se ofrecen online, tienen funciones de calendario y un banco de datos nutricionales y de ejercicios físicos. De esta forma el usuario puede verificar el contenido calórico del menú en un restaurante o al planear la lista de compras en el supermercado. La mayoría de este tipo de programas se encuentran en inglés, por lo que el usuario que no tenga facilidad para los idiomas, haría bien en instalar adicionalmente un programa de traducción para poder distinguir con claridad a los alimentos "buenos" de los "malos".